jueves, 17 de julio de 2008

Intruso dentro de una ecuación perfecta

Creo que alfinal estoy aqui otra vez, espero que no sea una mentira, el punto es que estoy aca, dejando que mi mente se libere, horas antes de uno de los examenes más determinantes de este ciclo para mi. Ayer me quede pensando, mi mente bago un momento, dejo a un lado tanto numero y se puso a reflexionar sobre algo que que, incidentalment queizá o porque yo mismo me lo busque, había visto unas horas atras.

Aveces las personas pasan, los recuerdos mueren bajo la sombra del crepusculo de la soledad que siempre me ha invitado a acompañarla. Pues claro platicando con la soledad estaba, cuando por cosas de la vida o de piezas que Dios mueve, aún no lo sé, la soledad se despidió de mi, me digo suavemente que era hora que tenía que irse y me hoy me tocaba a mi vivir bajo la compañia de talves alguien que te haga vivir. Aún no se había ido cuando me dió un consejo, el cual olvide por el pasar de los años. Me dijo que nunca cambiar la esencia de mi forma de ser para encajar en una zona de aparente seguridad, que no me dejará atrapar por aquello a lo cual no pertenecia, ni que me olvidare de donde alguna vez Dios me había sacado. Al fin la soledad se fue, y, paradojicamente, me quede acompañado. Prometiendome a mi mismo guardar lo que la soledad me habia dicho decidí emprender camino, iniciando una absurda vida social la cual muchas veces desprecio.

Al pasar de los años, las horas habían comido mi alegría, no pensaba más en lo que había prometido a mi mismo guardar, claro en consecuencia caí en lo que alguna vez tanto desprecié.
Me converti en un intruso dentro de una ecuación perfecta, aveces siento que no lo soy pero generalmente sí, en un personaje poco ortodocso de la clase de seres que conforman esta identidad, no fui más que parte de la corriente de la satisfacción absurda que me daba creer tontamente que estaba encajando.

No soy más que nada en ese mundo, simplemente no pertenesco ahí, algo me movió pero yo no soy así. Planeta de seres absurdos, que no hacen más que vivir de la mano extendida del ser generoso que los engendró, que rien pero tras de si tiene una carga de errores que no los dejan vivir, su criterio es tan abundante como petroleo en El Salvador, viven vidas de consumo masivo, toman café moca, sin saber los ignorantes, que tal, ha sido cortado por una familia que vive con menos de un dolar al día, lloran porque su mejor amigo no les habla, queman dinero en cigarros y apenas tiene edad para limpiarse el trasero. Ese no es mi mundo, soy un personaje irreal en tal, ando con menos de tres dolares en la cartera, no tengo carro, ni soy caucasico como ellos, ser pansón, pero lo sufientemente inteligente como para botarles las moral a estos niñitos porque no saben para donde se dirigen.

En que momento me convertí en eso, claro no vivo siempre ahí, pero aún así soy feliz, quiero arrependirme de eso, me ciritico a mi mismo por querer ser parte una sociedad de consumo las cual me ha llevado donde estoy, no soy parte de eso, no lo soy....Carlos Coto

No hay comentarios: